¿Te quita el sueño pensar que nos pondremos en los pies este verano? Nos encontramos en plena temporada de cambio de armario y en estos momentos a muchas de nosotras nos surge la misma duda.
Una vez revisado nuestro zapatero y tras recopilar las sandalias, alpargatas y demás calzado de la temporada anterior, comenzamos a pensar en los modelos que nos harían falta para pisar con fuerza este verano; y digo «nos harían falta» porque no hay nada que le guste más a una mujer que estrenar calzado nuevo. Las más pudientes, incluso, tienen la suerte de coleccionarlos!
La tendencia de la nueva colección viene definida por la comodidad, multitud de sandalias planas o semiplanas (algunas de diseño cuasi ortopédico), se mezclan con vestidos de lo más formal para dar lugar a combinaciones cuanto menos modernas.Victoria Beckham lleva varias colecciones presentado en París este tipo de mezcla; sin ir más lejos, el nuevo look book de Zara es un claro ejemplo de ello.
Sandalias romanas, de pedrería, sin olvidarnos de las bailarinas y slippers, siempre elegantes.
Para las ocasiones más playeras y casuales, siempre podemos recurrir a las alpargatas o espardeñas que cada vez han ido ganado más protagonismo y no solo en el calzador femenino. Este verano, arriésgate con nuevas versiones y estampados como la mezcla que propone Valentino y que eleva el esparto a la categoría del guipur. Modelos que encontrarás casi idénticos en algunas de las cadenas low-cost como Blanco o Stradivarius.
Por su parte la sandalia de tacón, ya despojada casi por completo de la plataforma, es el zapato del verano por excelencia, de pala y talón, con pulsera en el tobillo o en el talón aportan muchísimo juego a nuestros looks. Un calzado que pone a examen nuestros pies y con el que hay que tener especial cuidado en el atado y altura de las pulseras que van al tobillo, siendo las de color nude las que más estilizan al no producir ningún corte visual con respecto al color del resto de la pierna.
Pero si hablamos de estilizar, no nos podemos olvidar del zapato de salón y en especial de los llamados stiletto con puntera afilada. Esta temporada además y por influencia de Valentino vienen muy escotados en el empeine, por lo que todavía consiguen alargar más la silueta.
Una temporada marcada por los clásicos, con alguna que otra novedad que ya había entrado con fuerza a principios de los 2000. Sí, me refiero a los mules. Una mezcla perfecta entre el salón destalonado y el zueco más chic que podrás encontrar en todo tipo de diseños.
Con respecto al color, este verano parece llegar sin ningún pudor, con todo tipo de estampados e infinitas posibilidades policromáticas que en algunas ocasiones se mezclan con el pvc.
Los acabados metalizados, y los detalles en glitter serán una constante en las ocasiones de fiesta.
No hay que olvidar que un cambio de calzado apropiado es capaz de darle un toque diferenciador a cualquier outfit, que no hay nada como pisar con seguridad y que comodidad y confort también pueden ir de la mano… Ahora, ya sabes por qué calzado quieres apostar??
Almudena Rodríguez